Paleopaganismo
La raíz de lo que hoy día se llama paganismo es el paleopaganismo. Se inició en la edad de piedra como culto a los Vanir, deidades de origen nórdico asociadas con el chamanismo. Con el tiempo este culto fue evolucionando en cultos a la fertilidad y culto a los dioses de la caza. A comienzos de la edad de bronce aparece la escritura y de esa forma comienzan a registrarse los eventos y costumbres religiosas. En la época de mayor esplendor de esta edad comienza la adoración al sol y con ella la construcción de monumentos megalíticos cuyo símbolo más representativo es el Stonehenge, hecho por tribus adoradoras del sol.
Paganismo
Etimológicamente proviene del latín “paganus”, término este que designa a una persona que reside en el campo. Esa es una referencia en el periodo en que los cultos urbanos del Imperio Romano estaban siendo convertidos a la nueva religión, en cuando a la gente del campo aún continuaba los viejos caminos.
El término fue utilizado originalmente por los cristianos urbanos de Roma en un sentido peyorativo queriendo decir algo como religión Campesina. Más adelante la palabra amplió su significado, que sería “alguien que hace culto a las fuerzas de la naturaleza”. Así fue como, con el tiempo, los cristianos creciendo en número y poder político, asociaron el significado de paganismo en: “Hombre sin religión o sin Dios”.
Los Celtas
Llegada la edad de hierro los pueblos celtas impusieron su autoridad y sus cultos se fundieron con los cultos de los pueblos sometidos que usaban el bronce, y como resultado aparecen las civilizaciones nórdicas con adoraciones de héroes divinizados (Wothan, Thunder, Sigfried) continúa la adoración de dioses y diosas antiguos de la fertilidad y un sinnúmero de personajes y deidades mágicas tales como elfos, gnomos, duendes, hadas, ninfas y Banshees que inspiraron montones de libros de historias y poesía. Es en esta época en que aparecen las runas aunque no fue sino hasta iniciada la edad media que estos tuvieron un gran apogeo.
La Ocupación Romana
A comienzos del siglo I A.C. los romanos ocuparon gran parte de Europa y con ella introducen el culto a los dioses épicos post-griegos junto con toda su literatura; a pesar de su poder los romanos toleraron las religiones ya existentes en estas regiones, e incluso permitieron abrir templos de ellas en la propia Roma según se iban estableciendo en la metrópoli representantes de las diferentes regiones conquistadas.
El Cristianismo
La aparición de la religión cristiana ocurriría aproximadamente un siglo más tarde y con ella comenzaría su persecución por parte de las autoridades políticas y religiosos de la época. A medida que el imperio se hacía más débil y corrupto el cristianismo cobraba mayor influencia en este y pasa de ser una secta a una religión organizada, finalmente con el ascenso de Constantino al trono del imperio dicha religión se convierte en la oficial del imperio. Tras el reinado de Constantino el emperador Juliano intenta restaurar el culto a las antiguas deidades y es asesinado por un devoto cristiano. Finalmente el Imperio Romano se viene abajo y es invadido por una sucesión de pueblos de origen germano, los cuales, gracias a la astucia de los jerarcas cristianos, son convertidos a la religión cristiana, de esta forma se logra conservar el cristianismo como religión oficial en las regiones de Europa que antes pertenecían al imperio, mientras que las regiones limítrofes conservaban sus cultos nativos.
El caso de Britania es un caso particular digno de ser analizado aparte ya que esta región, al ser abandonada por las legiones de Roma a comienzos de la edad media, es invadida por los anglos y sajones, y estos en lugar de asimilarse a la cultura de los locales incluida su religión, decidieron conservar sus propias creencias. A pesar de su la creencia popular de que este fue uno de los periodos más oscuros de la historia británica se sabe a través de hallazgos arqueológicos que los sajones eran una civilización organizada y que eran capaces de ejecutar trabajos artísticos excelentes, entre los cuales encontramos el famoso broche de Kingston, descubierto en Kent. Fechado en el siglo VII, consiste en un diseño concéntrico, con una cruz en relieve decorada con discos y botones, también en relieve. En el fueron bañados en oro, granate, vidrio azul y conchas marinas blancas. Ese broche es un verdadero ejemplo de artesanía sajona en prueba de la mentira proclamada por aquellos que denominan los periodos sajones y escandinavos de la historia de Inglaterra como una edad oscura.
Absorción del Paganismo
Se debe de denotar que la transición de las antiguas religiones paganas al cristianismo fue un proceso bastante largo y complicado que tardó varios siglos en completarse. En toda Europa particularmente en las áreas rurales los paganos rehusaron aceptar el cambio aferrándose tenazmente a sus antiguas creencias. Percibiendo esto, los sacerdotes cristianos adaptaron estas creencias en sus dogmas religiosos y eficazmente las anularon por la absorción; ritos como el halloween e incluso la misma navidad tienen sus orígenes netamente paganos.
Para el final del siglo XI y después del XII las runas se convirtieron en un alfabeto místico usado para descubrir la vida de Jesús y sus discípulos. Un ejemplo clásico es la Cruz Ruthwel, encontrada en un cementerio de una Iglesia en Dumfries, con inscripciones rúnicas que cuentan la historia de la crucifixión mezcladas con símbolos paganos tales como pájaros y otros animales y flores silvestres. En el caso de las runas, estas fueron empleadas especialmente para los nombres de Jesús y los cuatro apóstoles: Mateo, Marco, Lucas y Juan. Eso demuestra la subsistencia de la práctica precristiana del uso de las runas para los nombres sagrados de los dioses. Las runas fueron encontradas en inscripciones hechas en el túmulo de un santo cristiano del siglo VII lo que demuestra que la fe en su poder mágico no disminuyó con la llegada de la nueva religión. Las oraciones cristianas frecuentemente usaron encantamientos paganos alterando apenas los nombres de los antiguos dioses paganos por aquellos santos y apóstoles. Folcloristas como Alexander Carmichael (1832-1912) pasaron la vida coleccionando oraciones gaélicas en uso en las tierras de la alta Escocia y en las Islas Híbridas. Muchas constituyen encantamientos paganos poco disfrazado para obtener buenas cosechas o para consagrar las semillas. Así como se invocaba a Jesús y los santos, esas oraciones también invocaban a Sta. Brígida, que es una versión cristianizada de la diosa céltica de los fuegos sagrados y manantiales santos, Bridget. Ejemplos de tales oraciones pueden ser encontradas en los libros de Carmichael “The Sun Dances (Las Danzas Solares)”.
Otros usos del término Pagano
El término pagano y sus equivalentes en otros idiomas también han sido utilizados por corrientes cristianas para designar a otras que se definen como cristianas pero conservan cultos sincréticos que recuerdan al paganismo. Por ejemplo, en la Iglesia de Bizancio los iconoclastas consideraban paganismo el culto a las imágenes de los iconodulas. Para algunos protestantes el culto a los santos de la Iglesia Ortodoxa, de la Iglesia Copta, de la Iglesia Anglicana y de la Iglesia Católica, (entre otras iglesias) sería una especie de paganismo. Igualmente, algunos eclesiásticos católicos europeos calificaban como semi-paganas prácticas sincréticas de los nativos americanos o asiáticos evangelizados.
Durante siglos los textos que utilizan este término son principalmente cristianos. Sin embargo, desde el siglo XIX, el desarrollo de un ocultismo ilustrado en la civilización occidental ha llevado a que algunos cultos se definieran a sí mismos como paganos y recuperen antiguas tradiciones paganas europeas. Es lo que a veces se llama Neopaganismo. Aunque el término pagano ha sido usado erróneamente para referirse a las religiones politeístas como el hinduismo, el animismo, el Vudú y las religiones afroamericanas, el chamanismo amerindio, el shinto, la religión tradicional china, y hasta al budismo, lo cierto es que estas comunidades religiosas NO SON NEOPAGANAS y algunas de ellas, ni tan solo son paganas.
Los seguidores del neopaganismo son de los pocos grupos religiosos que se proclaman orgullosamente como paganos.
“Historia Antigua”.