El color de los cristales por los que nos sentimos atraídos nos descubre cuáles son nuestras necesidades inconsciente, nos hablan sobre nuestra personalidad y reflejan el tipo de vivencia interna en el que nos encontramos. Seguidamente detallamos una síntesis del significado de cada color y lo que representa:
ROJO: La persona que escoge un mineral de este color, posee una gran energía y potencia. Tiene ímpetu y vive la vida con pasión. No le importa ser el centro de atención, es una persona muy activa e impaciente. Este color también denota valentía y un carácter extrovertido.
ROSA: Quien opta por el rosa, es alguien muy sensible, cariñoso y afectuoso con las personas de su entorno. Denota comprensión y tolerancia, son sus características principales. Las emociones son su punto débil dada su gran sensibilidad ante todo conflicto. Buscan siempre el apoyo y la aprobación de los demás.
NARANJA: Son personas muy activas pero, a la vez, muy organizadas. Poseen el equilibrio entre los dos extremos: prácticos, creativos y constantes. Tienen la seguridad necesaria para moverse por la vida con los pies en el suelo y manteniendo siempre nuevas ilusiones. La alegría y el optimismo son parte de su naturaleza. Este color indica, también, firmeza personal.
AMARILLO: Muy activo. Quien escoge el amarillo sabe implicarse plenamente en todo tema que sea de su interés. Es reflexivo y a la vez espontáneo, comunicador y alegre. Su vida transcurre de forma muy activa: necesita siempre ilusiones y retos que afrontar. Son positivos u muy alnalíticos, pueden dar la imagen de superficialidad aunque poseen una mente muy analítica y sus decisiones y forma de proceder son muy estudiadas.
VERDE: La cautela es una de las principales características de quien escoge el color verde. Les gusta mantenerse al margen de todo conflicto, observando. La tranquilidad, una vida pacífica y con sentido común son sus únicas metas. No les gustan las prisas ni sentirse agobiados, prefieren ir a su propio ritmo. Su amistad es profunda y sincera y tienen la capacidad de cuidar y proteger. También de dar aopoyo a los demás.
AZUL CLARO: Una preferencia o atracción por un mineral de este color, indica que la persona se encuentra en una etapa tranquila y equilibrada de su vida. Su alma necesita armonía. En esta etapa de vida, están muy sensibles y creativos. Su imaginación está muy desarrollada y goza de una muy buena capacidad de análisis. Mantienen las emociones en armonía y sin ningún tipo de desfase.
AZUL OSCURO: Denota una etapa en la que la persona desarrolla una gran seguridad en sí misma y disfruta de una inteligencia muy potenciada. También refleja seriedad y capacidad para mantener todo tipo de responsabilidades. Quien elige este color, huye de todo tipo de estridencias y desfases y se halla en un momento de introversión y de trabajo interior en el que necesita meditar, recapacitar y centrarse en la búsqueda del equilibrio, de su propio equilibrio.
VIOLETA: Cuando escogemos un mineral de color violeta, nos encontramos en una etapa de nuestra vida en la que la sensibilidad nos supera, en un período en el que analizamos todo lo trascendente. Buscamos más allá de toda apariencia y somos capaces de captar las energías más sutiles y espirituales de nuestra vida diaria y de nuestro entorno.
BLANCO: Si nos atraen los minerales blancos o incoloros es que nos hallamos en una etapa de cambio y asimilación de todo lo hemos vivido anteriormente. Tenemos la necesidad de sentirnos limpios e internamente en paz y amamos la sencillez y la independencia. Este tipo de etapa personal suele atraer, por la vibración que emana, a que otras personas quieran tener contacto con nosotros.
MARRÓN: La persona que tiene preferencia por el marrón, revela que necesita asentarse en todos los aspectos de su existencia. Necesita seguridad emocional, sentirse seguro y firme. Refleja que le da una gran importancia a la familia y que busca el equilibrio en la vida diaria, que le complica abrirse a nuevas experiencias. Cuando estas personas recuperan su estabilidad, atraviesan una etapa de vivificación en la que resurgen, recuperando su capacidad de vivir con mayor despreocupación e intensidad. En ese punto, suelen escoger que reflejan esa nueva ilusión.
NEGRO: La preferencia por el negro, indica que la persona se halla en una etapa transitoria de introversión en la que abandona cosas y personas e inicia una nueva vivencia. Refleja un final y un renacimiento interno.
Fuente: El libro mágico de los minerales (descatalogado).
http://morganabarcelona.com