El aceite de Rosa Mosqueta está revolucionando el mundo de la cosmética, la nutrición y la medicina natural, debido a que se ha revelado como uno de los más potentes regeneradores de la piel. Elimina y previene arrugas, estrías, manchas, cicatrices.
La Rosa Mosqueta es un arbusto silvestre de ramas delgadas y repletas de espinas, cuyos tallos y ramas están llenos de flores blancas y rosadas, alegrando el suelo pobre de algunas zonas de la Patagonia. También se encuentra en pequeñas zonas de Chile y Perú.
Cuando sus pétalos caen, la planta desarrolla un fruto rojizo de forma ovalada, repleto de unas enormes semillas (constituyen el 70% de su peso), y será de ellas de las que se extraiga el aceite, considerado hoy día como uno de los regeneradores dérmicos más poderosos que existen.
El aceite de Rosa Mosqueta es uno de los productos que mayor interés ha despertado en el campo de la Dermatología, la Nutrición y la Cosmética, debido a que sus usos y aplicaciones van desde la regeneración de tejidos dérmicos dañados, hasta el retraso en la aparición de las líneas de envejecimiento prematuro, la prevención en la formación de arrugas y la recuperación de pieles afectadas por quemaduras o incluso radioterapia.
USO EXTERNO: El aceite de esta semilla es un poderosísimo regenerador de la piel.
- Regenera y nutre la piel, eliminando visiblemente las arrugas y las cicatrices.
- Mejora la hidratación superficial actuando sobre el “factor natural de humectación”.
- Refuerza y multiplica la barrera de las ceramidas en el interior de la epidermis, reduciendo la pérdida de agua.
- Tiene una gran capacidad de revigorizar el fibroblasto, célula dérmica productora de colágeno, elastina, ácido hialurónico y responsable de la firmeza y elasticidad de la piel.
- Previene y corrige el fotoenvejecimiento y los problemas cutáneos debidos a las radiaciones solares a través de la autogeneración de melanina.
- Redistribuye la pigmentación permitiendo la eliminación de manchas solares, así como las producidas en los casos de acné, varicela o viruela, disimulando la hiperpigmentación producida por las cicatrices.
- En el caso de las mujeres embarazadas se recomiendan suaves masajes en los pechos y abdomen, durante el último trimestre de gestación, para evitar las estrías.
- Proporciona excelentes resultados en el tratamiento post-peeling, cicatrices post-quirúrgicas, quemaduras, estrías recientes, en definitiva en todos los casos en los que la piel necesite regenerarse de una manera rápida y eficaz
El aceite es muy ligero y se absorbe rápidamente, su pH es de 5.1 lo que le hace afín a la piel, además no tiene olor y tiene una textura ideal para el tratamiento local.
La Rosa mosqueta es un gran aliado para:
- El Cutis: El continuo empleo del Aceite de rosa mosqueta genera diversas acciones positivas en la belleza del cutis: rejuvenecimiento, acción antiarrugas, antibolsas y antiojeras.
Las vitaminas y nutrientes que contiene la Rosa mosqueta ayuda en la lucha contra el envejecimiento cutáneo; alisando los párpados, suavizando y tonificando la piel
- El Cuerpo: La rica composición del aceite de Rosa mosqueta es responsable de su acción hidratante en la piel, dando suavidad y tersura a la piel del cuerpo. Este aceite también puede ser usado para tratar ciertos problemas de piel como son las estrías y las cicatrices. Durante el embarazo se suele comprar este aceite para prevenir la formación de estrías.
- Las manos y Articulaciones: El aceite de rosa mosqueta es un excelente hidratante para las manos, que suelen perder textura con el paso del tiempo.
El aceite de Rosa mosqueta es usado también para los codos, talones y rodillas pues evita la natural tendencia a la sequedad de estas partes del cuerpo.